EE.UU. mantendrá la presencia de dos portaaviones en el mar Mediterráneo antes y durante la cumbre de la OTAN en Varsovia, informa la agencia Reuters. El portaaviones Harry S. Truman ya está en la zona tras cruzar el 2 de junio el canal de Suez, desde donde realizó varios ataques al Estado Islámico. Dentro de unos días se le sumará otro portaaviones, el Dwight D. Eisenhower, que se dirige al golfo Pérsico.
La fuente explica que una estancia prolongada de ambos navíos en el Mediterráneo no está relacionada con la seguridad de los participantes de la cumbre de la alianza, sino que busca conseguir un contrapeso a las actividades militares de Rusia (que con sus acciones cerca de las costas sirias ayuda a Damasco a combatir a los grupos extremistas) y al mismo tiempo acelerar su lucha contra el EI. La medida "permite la degradación constante del EI y una serie de ventajas operativas", declaró un portavoz del Mando Europeo de EE.UU. El despliegue simultáneo coincide con los ejercicios militares de la OTAN en Europa oriental y Turquía, que por lo que parece solo tienden a aumentar las tensiones con Rusia, dice Reuters. Las fuentes de la agencia entre los funcionarios estadounidenses alegaron que Rusia está operando buques de guerra y submarinos en el Mediterráneo y tiene programados sus propios ejercicios en las próximas semanas.
Declaraciones y reacciones
La presencia de los dos grupos de ataque que acompañan a los portaaviones en el Mediterráneo "demuestra nuestro apego a la seguridad en la región y provee una variedad de plataformas multiuso capaces de realizar nuevas misiones", declara el mando de la Armada de EE.UU. en un comunicado oficial."Estos dos grupos también mandan un fuerte mensaje de apoyo a los aliados y socios europeos". Es absurdo reclamar que Rusia busque cooperar con la OTAN, que decidiría unilateralmente si esta cooperación se materializa o no. Este lunes el grupo de ataque que encabeza el Harry S. Truman, que incluye el crucero de misiles Anzio y el destructor Gonzalez, realizó un total de 68 vuelos de combate y el lanzamiento de 52 misiles teleguiados contra el Estado Islámico en Irak y Siria.
La OTAN también justifica la acumulación de sus fuerzas en la región por una presunta e hipotética 'agresión' rusa. Esta clase de alegaciones ha sido refutada por Moscú en múltiples ocasiones. Los gobernantes rusos afirman que es la alianza la que está avanzando lenta pero constantemente hacia las fronteras rusas. Simultáneamente, los responsables de la OTAN manifiestan que Rusia debería colaborar con el bloque en la cuestión siria. El diputado ruso y presentador de televisión Alexéi Pushkov asegura que el propio bloque está más interesado en esa colaboración que Moscú. Según lo cita RIA Novosti, tachó de absurdo "reclamar que Rusia busque cooperar con la OTAN, que decidiría unilateralmente si esta cooperación se materializa o no".
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